Pasividad de las autoridades ante contaminación de agua.
La problemática en las reservas de agua naturales es el grado de contaminación tanto de las aguas como de los sedimentos. Esta degradación ambiental ha sido reconocida como un problema mundial durante las últimas décadas.
Los contaminantes del agua provienen ya sea porque se vierten directamente en ella, o porque entran de la atmosfera, o por escorrentía desde el suelo.
Con la adición de nutrientes provenientes de las actividades humanas se acelera el crecimiento de algas en una proporción mucho mayor, lo cual impide la disolución del oxigeno proveniente de la atmosfera.
La eutrofización de un ecosistema trae como consecuencia una producción excesiva de materia orgánica, la reproducción de los microorganismos aumenta y la parte inferior de la columna de agua se vuelve anoxica, lo que incrementa los índices de contaminación. Por ello, los ciclos naturales de nitrógeno, fosforo, carbono y azufre se ven afectados, convirtiendo a estos elementos químicos en nocivos para las aguas.
Nosotros no deberíamos enfocarnos en las consecuencias que trae contaminar nuestras aguas, la verdadera preocupación debería ser encontrar una solución para que esto no suceda mas, existen diversas instituciones encargadas de reglamentar las descargas industriales y municipales por mencionar algunas les puedo dar estos ejemplos: SIAPA, CNA, etc. Lo más crítico de todo esto es que este tipo de instituciones no tienen ni voz ni voto al momento de querer sancionar a una empresa que no cumpla las normas mexicanas debido a lo siguiente, ellos no cuentan con una acreditación ante la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) por lo que su palabra queda descartada en el momento en el que un laboratorio de particulares que se encuentre acreditado ante esta institución emita resultados distintos.
Lo cual pare ilógico debido a que como puede ser posible que instituciones de esta magnitud se queden de brazos cruzados mientras un laboratorio cualquiera los cuales en ocasiones ni siquiera cuentan con las instalaciones necesarias se encargan del trabajo que ellos deberían de hacer.
Así que yo exhorto a estas instituciones a que se acrediten ante la EMA para así poder mayor confiabilidad con respecto a las descargas que reciben nuestros ríos y de esta manera poder garantizar agua de calidad.
jueves, 3 de junio de 2010
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